Nos faltan dedos de una mano para hacer referencia a todas la veces que hemos hablado de lo disfuncional que es el algoritmo de Youtube. De tal forma que cuando Youtube detecta que has utilizado una canción con derechos de autor, automáticamente, elimina tu contenido y alarga su recuperación hasta casi un mes.
Invito a @jaimealtozano a hacer un grupo de apoyo psicológico para víctimas del horripilante sistema de copyright de YouTube.
— Alvinsch (@Alvinsch) 24 de septiembre de 2018
El vídeo de Hamilton entraba dentro del "fair use"
Ante este tipo de situaciones, lo recomendable es utilizar un fragmento corto para que el uso de ese contenido entre dentro de la legalidad. Sin embargo, el problema con Youtube es que el algoritmo no es capaz de diferenciar entre el creador que mide la cantidad de contenido con derechos que utiliza y el pirata que sube películas en screener.
Y esto es lo que le ha pasado a Jaime Altozano con su último vídeo sobre el musical Hamilton. Para ilustrar cómo se construye la banda sonora en función de la parte de la trama representada, utiliza distintos fragmentos de la obra original y eso al algoritmo no le ha gustado nada.
¿Resultado? YouTube ha vuelto a poner en evidencia la disfuncionalidad de su sistema de detección de copyright. Un sistema que no funciona de forma eficaz porque básicamente no cumple con su objetivo: diferenciar (en la mayoría de los casos) el uso legal del ilegal.
Warner España ha sido quién ha levantado el veto
Como si de una situación digna de cualquier control de aduanas se tratase, Jaime Altozano subió un escalón en la línea de comunicación y en lugar de hablar sobre derechos de autor con el correo automático de YouTube, preguntó sobre éstos a su propietario real: Warner Music.
La discográfica no solo atendió a Jaime y le dio la razón, sino que además movió los hilos necesarios para que YouTube volviese a poner el vídeo del divulgador en abierto para toda la comunidad.
Si Jaime Altozano hubiese reclamado por el procedimiento estándar que ofrece YouTube, a día de hoy su vídeo más laborioso hasta la fecha seguiría bloqueado y sin obtener monetización. Gracias a la comprensión y sobre todo al valor que Warner ha dado a su contenido en YouTube, Altozano ha conseguido recuperar su trabajo sin tener que eximir argumentos absurdos en un hilo de correos automáticos con YouTube.