"Me han desmonetizado el vídeo por cinco segundos de canción". Da igual cuando leas esto y a quién. Porque al algoritmo de YouTube no le importa si eres Rubius, Auron, Jordi Wild o el más rookie de los videocreadores. Vulnerar los derechos de autor, según qué tipo de youtuber seas y el contenido que hagas, puede ser un quebradero de cabeza.
Una forma de buscarse la vida que puede convertirse en un nuevo tipo de contenido
Si eres youtuber y parte de tus publicaciones oscilan en torno TikTok, habrás comprobado que monetizar ese tipo de vídeos es algo imposible. No importa si el enfoque del contenido es el de reírte de algunos playbacks y los musers que hay detrás de ellos, el algoritmo va detectar que estás utilizando un tipo de música con derechos de autor. Y aunque es posible que acabe midiendo lo cringe y lo irónico, de momento la herramienta se centra en el copyright.
Pese a que en la plataforma anteriormente conocida como Musical.ly sí existen acuerdos con discográficas como Sony y Warner, en YouTube esto no sucede, por lo que la práctica totalidad de vídeos cuyo contenido incluye alto de TikTok, no para de recibir reclamaciones.
Para sortear estos límites legales, algunos youtubers con vídeos dedicados a reacciones de la plataforma musical, han ideado una táctica bastante rudimentaria: cantarlas a capella. Creadores como Danny Gonzalez y Kurtis Conner perpetrando "In The End" de Linkin Park o "Believer" de Imagine Dragons ya forman parte de esta nueva tendencia donde la palabra entonación alcanza cotas insospechadas.
Reemplazar las canciones originales por estos tarareos que no pasarían ni el primer casting de 'La voz', comenzó con una manera de sortear el algoritmo de YouTube, pero ya se convertido en un nuevo tipo de contenido con vida propia.
Creadores españoles como ElRubius, AuronPla o Jordi Wild, ya se han lamentado en forma de vídeos o tuits de lo extremadamente difícil que resulta monetizar un vídeo en YouTube. Sin embargo, ellos han optado por la resignación y buscar otras plataformas como vía alternativa para monetizar su contenido. Y aunque apoyamos esta diversificación, abriríamos un Patreon solo para que esta incipiente corriente cruce el charco y podamos escuchar cómo es el talento musical de nuestros youtubers patrios.