He perdido la cuenta del número de veces que he dicho la siguiente frase: "internet es un lugar maraviloso, pero...". Son esos "peros" los que hacen que la herramienta más revolucionaria del siglo XXI, en ocasiones, juegue a la contra de la sociedad y no a favor. Youtubers como Gian GG son los responsables de la mala fama que precede muchas veces a los creadores de contenido digital y, en este caso, con razón.
"Me sentía la peor persona del mundo, pero tenía que seguir haciendo ese reto de seguir ignorando a mi abuela"
Gian GG es conocido en YouTube por subir vídeos nivel "Paso la noche en casa de mi amigo sin que se dé cuenta (Le pillo con su novia haciéndolo...)". Especialista en formatos como "24 horas haciendo [inserta actividad sensacionalista] y SALE MAL, Gian ha culminado recientemente en este ámbito con un vídeo donde menosprecia a su abuela.
Consciente de las ampollas que podía levantar este vídeo, Gian explica a su audiencia que el objetivo del vídeo es ignorar a su abuela y grabar las consecuencias. Ante esta premisa de partida, cualquier persona con dos dedos de frente pensará, pero ¿porqué?¿por qué tienes que comportarte de esa forma con una persona a la que se supone que quieres? Bien, la respuesta según Gian es: porque es su cumpleaños. ¿Qué mejor regalo que despreciar a tu abuela para después decirle "era broma, ven que te abrazo, yaya."
A todas luces es algo incomprensible a no ser que estés en la cabeza de este chico o seas fan suyo. De hecho, el vídeo consigue despertar muchas sensaciones en apenas 12 minutos donde las que más predominan son la vergüenza ajena y la lástima. Es algo así como ver un episodio de 'Hermano Mayor' en Cuatro, pero al menos en el programa de Mediaset sabes que la finalidad es reinsertar al adolescente en cuestión y hacerle entender que lo que hace está mal. Aquí no sucede esto. Vemos a Gian haciendo sufrir a su abuela mientras él se dirige a la cámara para decir principalmente dos cosas: "tengo que echarme laca porque mi pelo está fatal" y "qué mal me siento, pero tengo que hacerlo".
Sin embargo, lo más alarmante de este tipo de contenido no solo es que exista, sino que sea aprobado por parte de la audiencia (y la plataforma). Aunque bien es cierto que han sido varios los que han criticado su vídeo en Twitter, el vídeo cuenta con 45.000 likes vs 10.000 dislikes. ¿Cómo puede ser que a una parte de la audiencia este contenido le resulte entretenido y, sobre todo, le parezca que está bien?
Es en este punto cuando internet da un poco de vértigo y nos recuerda a Black Mirror, una vez más. YouTube y las redes sociales no dejan de ser el reflejo de nuestro comportamiento como sociedad y, aunque efectivamente, divulgadores como Crespo o Altozano cuentan con más de un millón de seguidores, otros como Gian GG tienen el apoyo de 1.404.941 personas que disfrutan viendo sensacionalismo audiovisual, en ocasiones, carente de escrúpulos.
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