A raíz del tratamiento que recibió el streaming del Rubius por parte de Youtube, fueron muchos los creadores que hablaron del desprecio que había mostrado la plataforma ante un evento que había batido récords. Muchos se preguntaban ¿cómo era posible que Youtube no mantuviese en Tendencias un vídeo que a las pocas horas de su emisión ya contaba con más de 15 millones de visualizaciones?
oye @YouTubeEspanol me habéis quitado así de gratis casi 2 millones de reproducciones del directo del torneo pero sabéis que no me vais a quitar nunca este brazo musculoso ;))) pic.twitter.com/eRH7XORn4n
— AuronPlay (@auronplay) 27 de marzo de 2018
El caso del streaming del Rubius no es una excepción. La relación entre Youtube y un alto porcentaje de sus creadores no es ejemplar ni mucho menos. Los sucesivos cambios en la política de monetización o el sensacionalismo cada vez más frecuente en la sección de Tendencias hacen que las tiranteces no desaparezcan, sino que se incrementen.
Youtube eliminando de "Vídeos del momento" todos los clips y directos del torneo de ayer. pic.twitter.com/54SqNAH3dV
— Miare (@MIAREsproject) 26 de marzo de 2018
A Youtube no le gusta el olor a perro viejo.
— Mangel (@mangelrogel) 27 de marzo de 2018
"Gano más con Twitch que con Youtube"
Esta es una de las primeras conclusiones que extraen los youtubers que se han abierto un perfil en la plataforma de streaming propiedad de Amazon. Wismichu, Felipez360 o Miare´s Project son solo algunos de los nombres que han decidido testear hasta qué punto Twitch es mejor o peor que Youtube.
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— Ismael Prego (@Wismichu) 29 de marzo de 2018
Este mes voy a cobrar más por Twitch que por Youtube. Es gracioso porque en comparación en Twitch tengo el 4% de visitas
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Mientras en Youtube los ingresos provienen de la publicidad, en Twitch monetizas gracias a los anuncios y a los suscriptores que tienes. Es decir, en esta plataforma hay dos tipos de espectadores: los seguidores y los suscriptores. ¿Diferencias? Unos pagan y los otros no.
Si a ello le sumamos que, desde los últimos cambios que hizo Youtube, los creadores con menos de 4.000 horas de visualización durante los últimos 12 meses no ven ni un mísero euro, comprendemos que muchos estén inclinando la balazan a a favor de Twitch.
Un modelo basado en las suscripciones
Si eres un creador medianamente conocido, a priori, es fácil ganar más dinero con Twitch que con Youtube. Con una comunidad fiel a la espalda es factible que los seguidores de Youtube vayan a ver el contenido que haces en Twitch e, incluso, que se suscriban.
Twitch pone al servicio de los espectadores dos tipos de suscripciones: Twitch Prime o las suscripciones individualizadas a determinados canales. La primera opción solo está disponible para los usuarios de Amazon Prime Video y permite, además de emoticonos, descuentos en juegos, etc, la opción de suscribirte al canal que tú quieras de forma gratuita.
Las suscripciones individualizadas están disponibles tanto para los usuarios de Prime que quieran suscribirse a más de un canal como para aquellos usuarios que no estén en Amazon. Funcionan como una suscripción de Spotify o Netflix, la única diferencia es que en lugar de pagar un servicio de VOD, pagas por ver el canal de un creador concreto.
Hay tres niveles de suscripción y, según la modalidad que pague el espectador, los derechos de cara al consumo de contenido serán unos u otros. De tal forma que los propios creadores son quiénes definen los beneficios que tendrán los suscriptores según la modalidad que elijan (4,99, 9,99 o 24,99$).
Pero, ¿cuánto paga Twitch?
Los creadores con derecho a monetizar en Twitch pertenecen al programa de socios o al de afiliados. Para Twitch, los socios "forman el exclusivo grupo de emisores de contenido, personalidades, ligas, equipos y torneos de videojuegos más populares del mundo" y los afiliados son streamers con un crecimiento emergente.
Es decir, los socios son creadores que llegan a Twitch con un fuerte engagement y los afiliados son los streamers por los que la plataforma de Amazon quiere apostar. A grandes rasgos para pasar a ser afiliado, un streamer tiene que cumplir las siguientes condiciones, al menos durante 30 días: contar mín con 50 seguidores, tener al menos 500 minutos totales y 7 días únicos de emisión y una media de 3 espectadores simultáneos.
Aunque la política de monetización se sienta sobre las mismas bases, el nivel de ingresos entre un afiliado y un socio es diferente. En ambos casos los beneficios llegan a través de la publicidad, el pago de los suscriptores (Twitch se queda el 50% y el streamer el otro 50%), y los bits (monedas que los espectadores regalan a los streamers para premiar los mejores momentos del directo).
De tal forma y haciendo un cálculo con números gordos, un afiliado que tenga 1000 suscriptores podrá ganar en un mes 2.495 euros solamente teniendo en cuenta los ingresos que provienen de esta parte de la monetización.
Obviamente, a esta cifra hay que restarle impuestos, cuotas de autónomo y demás etcéteras, pero el modelo de negocio que está configurando Twitch, de momento, huele a profesionalización y dignificación de un sector que hasta la fecha era archivado junto a los ninis.
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