En la delgada línea que existe entre el plagio y la casualidad, el último gran caso mediático lo hemos tenido entre dos gigantes de la música. Prototipos de cabeza de cartel de cualquier Primavera Sound. Radiohead demandando a Lana del Rey. Un Goliat contra Goliat con acordes como pruebas de la fiscalía y de la defensa. ¿Cómo saber quién tiene razón? ¿Mandamos a Jaime Altozano como prueba para el juicio?
It’s true about the lawsuit. Although I know my song wasn’t inspired by Creep, Radiohead feel it was and want 100% of the publishing - I offered up to 40 over the last few months but they will only accept 100. Their lawyers have been relentless, so we will deal with it in court.
— Lana Del Rey (@LanaDelRey) 7 de enero de 2018
El plagiador plagiado, la sorpresita
En su línea de acercar la teórica musical a dummies como yo, en apenas un minuto he podido entender que cuatro acordes podrían equivaler a una palabra y, como él mismo dice, nunca podrías acusar a un poeta por utilizar “fagocitar”. Aunque ese mismo término se haya utilizado en el título de alguna obra.
Más allá del análisis que hace Altozano sobre secuencias musicales que obviamente sí utilizan la misma estructura, lo mejor del vídeo es el contexto histórico que nos aporta. Si “Get free” de Lana del Rey ha sido demandada por Radiohead (o terceras personas con derechos sobre la canción), “Creep” fue a su vez demandada por un tercer grupo: The Hollies.
“The air that I Breathe” es una canción del año 1974. Un tema que Jaime Altozano también desgrana, mostrando que sus acordes, puentes y acueductos son tan similares al “Creep” de Radiohead que estos fueron sentenciados por plagio (BAIA) y ahora comparten el 40% de los derechos de autor con los Hollies. El girito de guión.
Pero lo que Altozano quiere transmitir con su vídeo no son dogmas de fe ni sentar cátedra. En su línea de divulgación musical, unido siempre a un “Keep calm” vital, la única conclusión del youtuber es “o todo es plagio o nada es plagio”. Que la fina línea entre la inspiración y la copia está ahí. Y que si no tienes opinión, siempre puedes copiarte la de alguien.