Son muchos los ilustradores que están aprovechando el fenómeno fan de OT para dar a conocer su talento a través del hashtag #OTDirecto y sumar adeptos. Sin embargo, en un entorno tan democratizado como es internet, a veces, se nos olvida que hay gente demasiado espabilada. El mismo listo que te coge la bici si no la has atado con un buen candado, puede agenciarse tu obra haciendo un par de cambios con Photoshop.
Un desconocido se está lucrando sin su permiso
La tuitera e ilustradora @corintia13x se ha visto envuelta de repente en un jaleo que no le hace ni pizca de gracia. Un seguidor suyo de Instagram le advirtió sobre que la web La Tostadora estaba comercializando camisetas con su ilustración de Amaia, la concursante favorita de Operación Triunfo.
Me acaban de decir que esta página está vendiendo mi ilustración de Amaia.
— Summer Mist🌹🍯 (@Corintia13x) 11 de enero de 2018
Que sepáis que es algo TOTALMENTE ILEGAL y que están VIOLANDO MIS DERECHOS DE AUTOR.
Esto es intolerable y muestra poquísimo respeto por el arte y el trabajo que conlleva. pic.twitter.com/veJdNuVig2
Después de denunciarlo en sus redes, rápidamente se puso en contacto con la plataforma que está permitiendo la comercialización de su arte sin tener en cuenta que el perfil que vende la camiseta no posee los derechos de autor de la ilustración.
"Hasta ahora lo que he hecho ha sido reportar el artículo, tal y como indican en latostadora.com que se realice si sucede algo similar...Aunque aún no he recibido respuesta, confío en que están procesando la información y la retirarán en unos días", comenta @corintia13x a WatMag.
A pesar de que la artista tiene todos los archivos originales que demuestran que es la verdadera autora, la plataforma donde se está comercializando la camiseta solo se refiere al copyright cuando se trata de mencionar cuestiones de autoría. Es decir, si alguien utiliza para lucrarse una obra que no es suya, pero que no tiene copyright, a priori, [la plataforma no tiene nada que decir al respecto](https://www.latostadora.com/faqs.php?y=108).
En ese caso, el artista en particular puede proceder a reportar el artículo y esperar a que La Tostadora le permita demostrar su autoría y tomar una decisión al respecto. Esta especie de "vacío legal" dentro de las condiciones de uso de la plataforma trae de cabeza a varios tuiteros que están mostrando su apoyo a @corintia13x y denunciando el silencio de la plataforma.
Ya podría @laTostadora_com tener un filtro porque esto es un claro caso de violacion de derechos de autor... espero que retiren el producto e inhabiliten al usuario que se está lucrando.
— Sentís (@Inimitible) 11 de enero de 2018
De hecho la tienda de este ser es todo diseños robados, echad un ojo y si reconocéis a un autor avisadle por favor: https://t.co/FdnLa4WomU
— Alesya (@AlesyaCrocodile) 11 de enero de 2018
La ilustradora nunca ha ganado dinero con su obra
La parte más surrealista de toda esta historia llega cuando @corintia13x nos cuenta que todavía no ha sacado rentabilidad a ninguno de sus dibujos. Ella pinta por amor al arte y comparte en redes sociales sus ilustraciones, con el objetivo de conocer el feedback de la audiencia. Ha sido a raíz del fenómeno OT cuando he subido más de 2000 seguidores y se ha hecho más conocida:
"Desde que hago ilustraciones sobre OT estoy recibiendo un montón de encargos, pero hasta ahora todavía no he vendido ninguna ilustración. Desde que publiqué el 5 de enero la ilustración de Amaia he conseguido muchísimos seguidores. Con todo el jaleo de La Tostadora, he tenido que registrar parte de mi obra en Safe Creative", añade la ilustradora.
La plataforma se lava las manos y se posiciona como intermediaria
La Tostadora se define como una plataforma que "vende productos originales creados por su comunidad". Pero, ¿cómo es posible tener este eslogan tan contundente y luego exponer en las preguntas frecuentes afirmaciones de las que se deduce que no te responsabilizas del contenido publicado? Si no eres responsable del contenido ¿cómo puedes asegurar que es original?
Hemos tratado de crear una tienda en la plataforma y es muy fácil. La interfaz te pide que incluyas un sitio web (acepta tu cuenta de Instagram personal), un par de fotos para el avatar, un email y datos financieros. Una vez que tienes el chiringuito montado, puedes empezar a colgar el material robado que te apetezca y esperar a que llegue la diversión cuando el artista se entere.
La Tostadora se lleva más del 50% del dinero de cada obra sin constatar los derechos de autor
Como tienda especializada en la venta de camisetas, a la hora de comercializar cada una de ellas es la Tostadora quien se encarga de conseguir la prenda y plasmar el diseño que el "creador" desee. Esta práctica permite a la plataforma llevarse más de un 79% de las ganancias: ellos fijan el precio base y el "creador" decide cuál será su margen en materia de derechos de autor.
Como se deduce de la imagen anterior hacerse rico gracias a La Tostadora es muy fácil. Tan solo tienes que esperar a vender 1000 camisetas de Amaia para ganar 1000 euros brutos (1€ por camiseta vendida) mientras que los 15.900€ restantes de las ganancias de la camiseta van a parar a la plataforma. Vale que de esa cantidad tienen que restar mano de obra y producto, pero el margen que se lleva la plataforma es descaradamente mayor.
Al ver que en calidad de periodista, el equipo de La Tostadora no me respondía, decidí hacerme pasar por un miembro del club de fans de Amaia para preguntar qué pasaría si en el concierto de OT llevamos camisetas cuyos derechos de autor han sido infrigidos. Pero, nada. Como fan obtuve el mismo silencio sepulcral que como periodista. Mi gozo en un pozo.
