"Pop de barrio para la bajona". Si pocos grupos españoles tienen claim propio, lo que tenemos claro es que ninguno puede alcanzar las cotas autoreflexivas que consigue el de la banda formada por Paola, Alicia y María. Siguiendo una estela revival que le está sentando muy bien al pop nacional, el grupo madrileño va sumando singles, festivales y estribillos pegadizos.
“Que si pudiera estar sin ti ya lo estaría. ¿Pero no ves que todavía me haces falta? No sé por qué, porque eres una mierda seca. Pero te veo y la falda se me levanta”.
Así suena el grupo que sigue el legado de Fresones Rebeldes
'Canción de pop de amor', 'Bisexual', 'Mierda seca'. Cariño ya merecería nuestra atención si nos limitáramos a su talento para los titular las canciones. Pero más allá de naming, lo de Paola, Alicia y María da para mucho más. Porque detrás de esos títulos se esconden una serie de temas muy pop que entroncan a la perfección con esta especie de new-new age que estamos viviendo.
A diferencia de otros grupos como La Plata y Carolina Durante que también suenan a los 80 y los 90, Cariño juega más con la electrónica y prescinde de elementos como la batería. Tanto su música como las letras transmiten una total falta de pretensiones y prejuicios. Algo que les permite converger en una mezcla perfecta (y nunca antes concebida) de La Casa Azul con C. Tangana.
Las ganas de jugar que muestran con sus canciones, incluyendo esta versión del propio C. Tangana, recuerdan a la época del tontipop y Los Fresones Rebeldes. Un sonido muy similar pero pasado por filtros de Instagram y con historias sobre el Tinder. Sin ir más lejos, fue gracias a esta famosa aplicación para ligar donde se conocieron Paola y María, las fundadoras de una banda a la que después se sumó Alicia.
Con apenas dos años de trayectoria, Cariño se gestó en el verano de 2017 y lanzó el primer single a principios del año pasado, al trío ya les ha dado tiempo a firmar por Elefant Records, publicar un Mini-LP llamado 'Movidas' (¿ves porque son las reinas del naming?) y formar parte de festivales como Tomavistas o Les Arts donde defenderán su punk-pop veraniego.