Chris Brown acaba de lanzar una nueva canción junto a Nicki Minaj y tan solo 4 días después de la publicación del videoclip en YouTube ya ha sido salpicado por la polémica. Y es que una buena parte de las escenas del videoclip son una mera copia del portfolio de aristas como Marius Sperlich, Vanessa Mckeown o Tony Futura.
"El problema es que copian ideas y no atribuyen el crédito al autor"
Tal y como ha denunciado el artista alemán Marius Sperlich "Aparentemente mi trabajo ha sido copiado por el director creativo del nuevo vídeo de Chris Brown y Nicki Minaj, “Wobble Up”, sin mi permiso y sin mencionarme en los créditos, junto al trabajo de otros artistas famosos como Tony Futura o Vanessa Mckeown", ha explicado el fotógrafo en su cuenta de Instagram mientras interpelaba a los cantantes.
Sin embargo, hasta ahora ni él ni los otros dos artistas han recibido respuesta al respecto, ni tampoco el reconocimiento de su trabajo por parte de Brown y su equipo. Y es que en este tipo de casos, aunque los medios de comunicación utilicen la palabra supuestamente para lavarse las manos, las evidencias hablan por sí solas y como bien dice el artista y youtuber Vilonious TV "no estamos hablando de inspirarse en el trabajo de otra persona, sino de copiar casi pixel por pixel".
Este problema es algo recurrente cada cierto tiempo en internet. Debido a que el contenido es accesible para todo el mundo, hay quienes se creen que los derechos de autor brillan por su ausencia o que la propiedad intelectual no existe en un portfolio que está presente en Instagram: "Ayúdanos a difundir la conciencia en todos los campos creativos y en la industria creativa porque el crédito es lo único que permite que la gente conozca nuestro trabajo." compartía Tony Futura, otro de los artistas afectados.
Algo más que parecidos razonables. A pesar de que la campaña por visibilizar el trabajo original de los artistas es insistente en redes sociales, Sperlich, Futura y Mckeown aún no han obtenido respuesta por parte de del equipo del videoclip.
Por lo tanto, lo único que les queda es continuar luchando porque la gente vea que realmente estamos ante un caso de plagio y una falta de consideración ante el trabajo de otras personas. La difusión de las fotografías que comparan el trabajo original y los frames del videoclip no buscan mala prensa para el cantante americano, sino que la industria y los fans sepan que ellos también forman parte de ese gran trabajo audiovisual.
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