El Roast parece estar viviendo una época dorada. Este formato cómico, basado literalmente en poner a parir al prójimo, es lo más alejado que existe a los límites del humor. Si has tenido la oportunidad de ver alguno de los programas que Comedy Central está reponiendo (o a través de YouTube), en Estados Unidos nos llevan años de ventaja (salta la sorpresa). En un Roast norteamericano puedes ver cosas tan locas como hacer chistes sobre la muerte del padre de Pete Davidson (humorista y novio de Ariana Grande) en los atentados del 11-S y que este, lejos de enfadarse, aplauda.
Trasladado a YouTube, el formato del Roast tuvo un girito estilístico interesante que lo convirtió en algo tan festivo como una canción. El #RoastYourselfChallenge es algo así como si leyeras tuits de odio sobre tu persona pero con, por ejemplo, una base rap de fondo. En España, famosos youtubers e influencers como Dulceida o JPelirrojo no dudaron en practicarse un hara-kiri cómico.
Cuando el #RoastYourselfChallenge puede ser como una canción del verano
Ideado por el norteamericano Ryan Higa como respuesta al "drama" que había entre youtubers que se peleaban entre ellos a través de sus publicaciones, #RoastYourselfChallenge lleva desde el verano de 2016 pasando de creador en creador sin que el tag desaparezca. Un reto que no es otra cosa que la demostración definitiva de sentido del humor. Porque no hay nada mejor en la comedia que reírte de ti mismo.
Pero si el Roast ya era un género brillante y sano en su origen, los youtubers han sabido elevarlo a algo más gracias al #RoastYourselfChallenge. Su transformación en canción es algo que lo vuelve más ingenioso y currado. Y ahí es donde aparece uno de los mejores ejemplos de Roast que hemos podido encontrar en YouTube a cargo de la Familia Carameluchi.
La familia vlogger que cuenta su día a día (ya sea en Estados Unidos, Reino Unido o España), se ha marcado un #RoastYourselfChallenge que parece más una canción del verano que reto Roast como tal. El doble combo de la Familia Carameluchi es que el reto les ha valido para celebrar su primer millón de suscriptores: "Y nos dicen vagos, flojos, que pronto se nos acaba este chollo. Y aquí estamos, no pudieron detenernos porque los Carameluchis ahora somos un millón".
