El año 2018 nos había dejado un gran trolleo con nombre y apellidos: 'Bocadillo' de Wismichu. La falsa película de Ismael que desembocará en un documental sobre el proceso que rodeó a un film que no era tal y que tuvo un estreno fake en Sitges. Con sus pros y sus contras, era algo nuevo. Muy de Joaquin Phoenix con 'I´m still here'. Lo pudiste amar u odiar, pero detrás de todo había un proyecto concebido desde el principio.
Estábamos a punto de otorgarle a Wismichu un premio honorífico que uniera en la misma categoría al mejor actor con el youtuber del año, hasta que Tiparraco publicó ayer la segunda parte de su entrevista con El Espiritista. ¿Un nuevo momento incómodo? ¿Cuántas veces le iba a llamar "loco"? ¿Espiritista se levantaría esta vez y le golpearía con la silla? No, porque lo que pasó a continuación te volará la cabeza sorprenderá.
El Espiritista ha redefinido el concepto de trolleo
Efectivamente, Manavitox estaba interpretando a un falso gurú. Y no nos digas que lo viste venir y que te lo esperabas. Lo de Bruce Willis en 'El sexto sentido' te lo pasamos, pero ni tú ni nadie se imaginaba que detrás de El Espiritista había un adolescente con maneras de actor como ha destapado en una nueva entrevista con Tiparraco: "Tengo 16 años (...) voy al cole y ahora estoy estudiando química".
El Espiritista era un personaje. Toda una gran performance que conocían y apoyaban hasta los familiares del propio Manu (así es su verdadero nombre): "Mi familia lo ve bien (...) a mi abuelo le encanta, está todo el día mirándolo. Y mis padres me dicen cuando llevo cuatro días sin subir vídeos que lo haga o se me va a ir la gente".
Como explica a lo largo de la entrevista a Tiparraco, lo único real era el interés de Manu sobre el mundo de la autoayuda, de la cual tenía conocimientos gracias a sus lecturas por internet. También reconoce haber investigado el mundo de las sectas, lo que nos lleva a pensar que su personaje no sólo tenía fines cómicos sino también una crítica a "la espiritualidad mal entendida".
"Me encantaría ser actor"
En un alarde de genialidad e interpretación, detrás del extraño ser que hablaba a la cámara sin pestañear y parecía querer introducirnos en algún tipo de secta que aún no conocíamos, tan sólo había un chaval de 16 años al que le gustaría ser actor. Se estaba quedando con todos nosotros y lo había conseguido. Desde AuronPlay (¿verdad?) al último de sus seguidores.
"Espero que en el futuro me valga para algo. Asociarme con alguien, salir en una serie..."
Más allá de todos los vídeos que ya nos ha dejado en su cuenta de Instagram, el artista anteriormente conocido como El Espiritista (ni él mismo sabe qué va a pasar con sus publicaciones a partir de ahora) tiene en la primera entrevista que hizo con Tiparraco el mejor de los curriculum para intentar una carrera como actor. La retahíla de tomas falsas provenientes de esa falsa charla, muestran a Manu entrando y saliendo del personaje. El no pestañear, "el mandibuleo", los gestos, la mirada fija... Recursos interpretativos propios de profesionales.
Manu, desde aquí te mandamos nuestros dieses.